¿Está pensando en rellenos, pero le preocupa tener un aspecto "hecho" o poco natural? No es el único. Los rellenos están diseñados para restaurar el volumen y suavizar las arrugas, pero si se hacen bien, no le harán parecer hinchado o congelado. En lugar de eso, sustituyen tranquilamente lo que se ha perdido con el tiempo: suavizan las líneas profundas, levantan las zonas de aspecto cansado y realzan sutilmente rasgos como los labios, las mejillas y la mandíbula.
El tratamiento es rápido y no quirúrgico.
La mayoría de las personas ven los resultados inmediatamente después, pero la magia se produce en los días siguientes, cuando el relleno se asienta y se mezcla de forma natural con sus propios rasgos. No hay cambios drásticos de la noche a la mañana. Nada de "todo el mundo lo notará". Sólo una versión más fresca y tersa de usted.
Los resultados duran entre seis meses y un año (dependiendo del tipo utilizado), por lo que nunca se quedará estancada si desea ajustar o perfeccionar su aspecto con el tiempo.
Realizados por las manos adecuadas, los rellenos nunca deberían gritar "me he operado". Deberían susurrar: "Me siento y tengo mejor aspecto".
Restauran el volumen perdido, alisan las arrugas y mejoran el contorno facial. Los rellenos proporcionan resultados de aspecto natural al instante, con efectos que pueden durar de 6 meses a 2 años, dependiendo de la zona y del producto utilizado.
Antes de los rellenos, la pérdida de volumen y las líneas de expresión pueden hacer que los rasgos parezcan cansados o menos definidos. Después del tratamiento, el rostro tiene un aspecto renovado: los contornos se alisan, los labios se rellenan y la piel está más hidratada. El cambio es sutil pero perceptible: sigue pareciendo usted misma, pero más descansada y equilibrada.











